
frapuccino
Sólo suenan las hojas de los arboles, las teclas, el resto está en silencio. Como yo. No sé que escribir, tengo mil pensamientos, el “problema” que lo vas a leer. Con arena entre los dedos de los pies, el pelo en la cara, un pijama blanco y negro, una bronca a mis espaldas recien echada. Un olor, madrid, un sabor, un sentimiento de vacio increible.
Sin más ni más, dejo la foto, el resto me lo quedo dentro.
